Biden contra China: EEUU aplicará aranceles del 100% para autos eléctricos
A partir del 27 de septiembre los aranceles contra los productos de manufactura china subirán un 100% tras decisión del gobierno de Joe Biden.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El gobierno de Joe Biden pisó el acelerador a fondo contra las importaciones chinas, aumentando aranceles contundentemente. Desde el 27 de septiembre, entra en juego un arancel del 100% a los autos eléctricos chinos, del 50% a las celdas solares y del 25% a productos como el acero, aluminio, baterías para autos eléctricos y minerales clave. La idea es proteger las industrias estadounidenses estratégicas de la sobreproducción china, impulsada por el Gobierno de allí.
También, desde 2025, habrá un arancel del 50% sobre los semiconductores chinos, que incluye cosas nuevas como polisilicio para paneles solares. Los ajustes son parte de los cambios en los aranceles punitivos de la "Sección 301" anunciados por Biden en mayo, que afectarán bienes por 18 mil millones de dólares. La movida busca evitar que la industria de autos eléctricos y otros sectores clave dependan demasiado de los suministros chinos.
Desde la Casa Blanca, Lael Brainard, una de las asesoras, comentó que los aranceles "duros y específicos" son necesarios para contrarrestar las políticas de China, que subsidian a su industria y generan sobrecapacidad. Mientras tanto, EE.UU. sigue invirtiendo fuerte en sus propios sectores de vehículos eléctricos, energía solar y semiconductores.
Obviamente, los chinos no se quedaron callados. Prometieron represalias contra estos aranceles que consideran "intimidatorios". En Europa y Canadá también se están sumando al juego de los aranceles altos a los vehículos eléctricos chinos, igualando el 100% de los americanos.
La medida tiene un alivio temporal para los puertos norteamericanos, que enfrentaban un arancel del 25% sobre grúas gigantes que solo fabrica China. También se ajustaron los aranceles a equipos médicos, como máscaras y jeringas, pero con algunas excepciones.
En definitiva, Biden busca frenar la avalancha china y dar respiro a sus industrias. Pero esto apenas empieza, y ya están todos listos para la próxima jugada en esta guerra comercial que se profundizará más allá de quien sea el próximo presidente, ya sea Donald Trump o Kamala Harris.
