Nvidia realiza una apuesta de USD 2.000 millones para optimizar el diseño de chips

NVIDIA y Synopsys anunciaron una asociación estratégica ampliada destinada a transformar el modo en que se diseñan y desarrollan productos tecnológicos en múltiples industrias.

Como parte del acuerdo, NVIDIA invirtió USD 2.000 millones en acciones comunes de Synopsys, a un precio de USD 414,79 por acción. El objetivo de este vínculo es integrar la potencia de la computación acelerada por GPU, las capacidades de IA de NVIDIA y las herramientas de diseño, simulación y verificación de Synopsys para ofrecer soluciones de ingeniería más eficientes.

La alianza está diseñada como un proyecto plurianual que busca atender los crecientes desafíos de los equipos de I+D: complejidad creciente de los sistemas, altos costos de desarrollo y presión por reducir el tiempo al mercado.

Al combinar las bibliotecas CUDA-X de NVIDIA, sus tecnologías de IA física y capacidades de “agentic AI”, con la suite de soluciones de Synopsys (diseño de chips, verificación física, simulaciones moleculares, análisis electromagnético, óptico, entre otras), se apunta a diseñar, simular y verificar productos inteligentes con mayor rapidez, precisión y menor costo.

Una de las innovaciones clave será la creación de “digital twins” (gemelos digitales), que permitirán probar virtualmente diseños complejos antes de fabricarlos. Esto es especialmente relevante para sectores como semiconductores, automotriz, aeroespacial, industrial y salud. Además, la alianza contempla soluciones “cloud-ready” que habiliten a equipos de distintos tamaños —no sólo grandes corporaciones— a acceder a estas herramientas aceleradas por GPU.

NVIDIA justificó la apuesta argumentando que la combinación de inteligencia artificial, computación acelerada y herramientas de ingeniería permitirá “reimaginar la ingeniería y el diseño” y dar forma a productos innovadores para el futuro. Por su parte, Synopsys destacó que desentrañar la creciente complejidad de los sistemas inteligentes exige una integración profunda entre electrónica y física, potenciadas por IA y computación de alto rendimiento.

Para la industria de semiconductores y diseño electrónico, este acuerdo marca un hito: simboliza la convergencia entre hardware de alto rendimiento, software de diseño especializado e IA avanzada. Esa convergencia podría acelerar dramáticamente los ciclos de desarrollo y permitir diseños más sofisticados, abriendo oportunidades en mercados tan disímiles como robótica, automóviles autónomos, dispositivos médicos, telecomunicaciones y energía.