Subirá el mínimo no imponible de Ganancias a 2 millones de pesos en septiembre
Por el ajuste por inflación, sube el mínimo no imponible del impuesto que afecta a unos 800 mil trabajadores argentinos.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Después de que se restableció el Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, unos 800.000 trabajadores volvieron a pagar el tributo. Pronto, el mínimo no imponible aumentará a unos $2 millones para un empleado soltero sin hijos, según estimó la consultora Focus Market basándose en los últimos datos de inflación de julio y las proyecciones para agosto.
La ley prevé una actualización de las escalas salariales en septiembre, usando como referencia la inflación de junio a agosto. Según el INDEC, los precios subieron un 4,6% en junio y un 4% en julio. Se espera que en agosto suban otro 4%, lo que llevaría el mínimo no imponible actual de $1,8 millones para un soltero a $2.036.000, y para un casado con dos hijos, de $2.340.000 a $2.647.000.
Este cálculo se basa en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) para esos meses, que proyectaba un 4,6% en junio y un 4% en julio. Además, se espera que la cifra de agosto sea similar.
A partir de 2025, las escalas del impuesto y las deducciones se ajustarán por inflación de manera semestral, pero este año habrá una actualización especial en septiembre para evitar que la inflación desajuste los valores.
Con el régimen anterior, las escalas no se actualizaban y los sueldos alcanzaban rápidamente el mínimo no imponible, quedando gravados con una tasa del 27%. Ahora, el impuesto es progresivo, con tasas que van del 5% al 35%.
La restitución del Impuesto a las Ganancias, anteriormente eliminado por idea del ex-ministro de Economía, Sergio Massa, fue una de las medidas mas resistidas y criticadas del actual Gobierno, su impacto político deberá esperarse para las elecciones legislativas del año próximo.
Aunque los sueldos empezaron a ganarle a la inflación en los últimos meses, quienes paguen Ganancias verán una reducción en sus ingresos, lo que limitará el impacto de las mejoras salariales logradas en las paritarias en el consumo. Desde noviembre de 2022, los salarios subieron un 772%, pero las tarifas aumentaron un 1.085%, dejando una brecha del 40,5% entre precios regulados y salarios.
