Luego de aumentar las retenciones, el Gobierno reabre las exportaciones de aceite y harina de soja
Luego de aumentar la alícuota para las exportaciones, los productores pueden volver a exportar.
Por Simón Salas Seeber
A través de dos decretos publicados en el Boletín Oficial, el sábado pasado el Gobierno oficializó la suba de retenciones para la harina y el aceite de soja, elevando las alícuotas del 31% al 33%. El mismo día, el Gobierno anunció la creación del "Fondo Estabilizador de Trigo" que tiene el objetivo de subsidiar el insumo, para así lograr "estabilizar del costo de la tonelada de trigo que compran los molinos argentinos".
El alza de dos puntos en el impuesto implicaría una recaudación fiscal adicional de 425 millones de dólares para el Gobierno, según un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BdeC).
El aumento de las alícuotas trajo quejas por parte del campo; el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro Exportador de Cereales (CIARA - CEC), Gustavo Idígoras, sostuvo que “el Gobierno no tiene facultades delegadas para subir alícuotas. Esta suba no tiene sustento legal”.
En el día de hoy, la noticia pasa por la reapertura de las exportaciones de la harina y aceite de soja, anunciado por la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios, anexo del ministerio de Agricultura. El Registro de Exportaciones de Ventas al Exterior (DJVE) en ambos rubros había sido cerrado el domingo pasado. El comunicado, publicado en el Boletín Oficial, define:
Habiendo recibido las correspondientes instrucciones del señor Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca; esta Subsecretaría de Mercados Agropecuarios pone en conocimiento del Sector Exportador que a partir de las 00:00 hs. del día 21 de marzo de 2022 se procede a la apertura del registro de las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior, correspondientes a harina y aceite de soja.
Julián Domínguez, ministro de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, comentó en la jornada de ayer: "esto se realiza con el propósito de captar los precios internacionales de esta coyuntura histórica, y por eso se decidió abrir los registros de exportación de la cosecha 22-23 por un total de 8 millones de toneladas de trigo, que se suman a las 2 millones de toneladas ya autorizadas". Además, agregó que "con esta decisión pretendemos lograr el objetivo de darle previsibilidad a los productores para la próxima siembra de trigo y lograr un nuevo récord de producción".
La remoción de este obstáculo es una gran ventaja para la argentina, gran exportadora de dichos insumos. En 2021 las empresas que conforman la industria aceitera realizaron embarques por más de 30 millones de toneladas, y fueron las responsables de generar la mayor cantidad de divisas por ventas al exterior que ingresaron al país: más de 20.000 millones de toneladas y aporte por retenciones de US$12.105 millones para la harina de soja y 7.101 millones de dólares para el aceite de soja.
El panorama internacional está turbulento, aunque Argentina se podría beneficiar en algunas áreas. En lo relativo a la soja, el insumo alcanzó precios récord en las últimas semanas, cotizando alrededor de los 625 dólares la tonelada.
La escasez de insumos básicos y materias primas en el mundo, sumado al temor que generan las sanciones a Rusia, productora clave de muchas de ellas, dispararon los precios y la Argentina con su gran industria aceitera tiene una ventana de oportunidad para capitalizar el ingreso de dólares mediante la exportación de los mismos.
