El consumo repuntó un poco en agosto: creció 0,9% interanual
Tras un julio bajo en ventas, los números del consumo masivo mostraron una mejora en agosto, aunque todavía la foto general es de cautela.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Después de un julio donde el bolsillo había pisado el freno, en agosto el consumo masivo pegó un pequeño salto: subió 0,9% en comparación con el mismo mes del 2024, según datos de Focus Market. Si se lo mira contra julio, la suba fue más marcada, de 4,4%.
El dato viene del lector de códigos Scanntech, que analiza más de 750 puntos de venta en todo el país. Ahí se ve que la cantidad de tickets prácticamente no se movió (apenas 0,1% arriba), pero sí creció la cantidad de unidades por compra, con un 2,2% de mejora.
En el AMBA, la recuperación fue más notoria: las ventas treparon 13,3% frente a julio y 2% en la comparación interanual, dejando atrás la fuerte caída del 11,7% que habían sufrido en julio. En el interior, en cambio, la cosa estuvo mucho más chata: solo subió 0,1% mensual y 0,2% anual.
La facturación también mostró diferencias: mientras que en el AMBA avanzó 11,4% mensual y 30,5% interanual, en el resto del país se movió en negativo (-1,8%) y apenas arriba 0,2% en el año. El ticket promedio se acomodó en \$8.966, un 2,6% más que en julio y 33,3% arriba contra el mismo mes de 2024.
“El bolsillo aprieta y manda. Los ingresos no siguen el ritmo de los precios y la incertidumbre sobre tarifas y empleo hace que la gente se concentre en la compra chica, lo justo para el día a día”, señaló. Para la industria, el desafío es adaptar sus estrategias a este nuevo escenario, donde prima la frecuencia por sobre el volumen y la fidelidad a la marca pasa a segundo plano.
En paralelo, el Gobierno busca dar señales al mercado con bajas de tasas de interés y renovaciones de deuda del Tesoro. En la última licitación consiguió cubrir el 91,4% de los vencimientos, lo que para algunos analistas ayuda a descomprimir un frente que complicaba a empresas y familias.
El dato de agosto muestra un respiro, pero no una recuperación sostenida. El consumo todavía está lejos de un repunte firme y lo que se ve es más un “rebote técnico” que una tendencia sólida. La mejora en el AMBA contrasta con un interior que sigue planchado, reflejando desigualdades regionales que no se corrigen fácilmente.
De fondo, lo que marca el termómetro es el poder adquisitivo. Lo que viene dependerá tanto de la capacidad del Gobierno para estabilizar como de la confianza de la gente en que su plata va a rendir algo más.