Diputados presentan un proyecto para prescindir de la SUBE
En un marco de nuevas tecnologías para facilitar el día a día, podría dejarse en desuso la SUBE. Los detalles.
Por redacción
Una nueva novedad podría ocurrir en la forma de viajar: la despedida de la SUBE. Esta tarjeta se ha hecho fundamental para trasladarse en transporte público en Argentina, es por esto que el diputado nacional de la UCR Jorge Rizzotti presentó un proyecto para que el sistema pueda usarse a través del celular con tarjetas digitales que usen la tecnología NFC.
Cabe señalar que entre los inconvenientes que presenta la SUBE se le agregan que puede extraviarse frecuentemente y que en reiteradas ocasiones es difícil recargarla sobre todo a altas horas de la noche.
Por su parte, la iniciativa detalla que los usuarios podrán tener la SUBE en una aplicación oficial y para acceder tendrán que estar registrados con una cuenta asociada a sus documentos de identidad. Estas tarjetas digitales tendrán la misma validez y condiciones de uso que las tarjetas físicas actuales, y permitirán pagar la tarifa del viaje que se descontará del saldo digital.
"La iniciativa no sólo mejora la comodidad y agilidad en los pagos, sino que también ofrece un nivel adicional de seguridad mediante mecanismos de autenticación y encriptación de datos de usuarios y garantiza una mejor trazabilidad y control de los pagos", explicó el diputado jujeño.
En ese sentido, Rizzotti agregó que "la implementación de SUBE Digital mediante tarjetas digitales con tecnología NFC es una medida oportuna y beneficiosa ante la escasez de tarjetas físicas en el mercado y las dificultades que esto genera para los usuarios del transporte público".
"Además, contribuirá a mejorar la movilidad urbana, brindar una experiencia más satisfactoria a los usuarios y promover la eficiencia y la innovación en el sistema de transporte público en Argentina", concluyó.
El Sistema Único de Boleto Electrónico cumplirá 12 años en octubre, funciona en unas 50 localidades del país, incluyendo el área metropolitana de Buenos Aires, donde por mes viajan más de 13 millones de personas en más de 24 mil colectivos, nueve líneas de tren y siete líneas de subte.
También está en ciudades como Rosario, Mar del Plata, Bahía Blanca, Mendoza, Jujuy Neuquén y Bariloche. Incluso funciona en las lanchas que recorren las islas del Tigre. Cuesta $635, permite viajar con saldo negativo y aplicar tarifas diferenciales para estudiantes, jubilados y empleadas domésticas. Ventajas que conocen todos los usuarios del transporte público, sean porteños o bonaerenses.
