Argentina y EE:UU sellan un acuerdo clave para modernizar la Aduana y reforzar el control fronterizo
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) firmó con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) un entendimiento para intercambiar información, agilizar operaciones y mejorar la detección de riesgos.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La relación aduanera entre Argentina y Estados Unidos sumó un nuevo capítulo: ARCA y la CBP rubricaron un acuerdo de cooperación que apunta a profundizar la digitalización, el control y la transparencia en el comercio exterior. Según explicaron desde ARCA, el documento representa “un paso clave para profundizar la modernización, digitalización y automatización de los procesos aduaneros entre ambos países”.
En redes sociales, la entidad argentina detalló que el entendimiento busca “fortalecer la coordinación bilateral, potenciar la detección temprana de amenazas y combatir delitos transnacionales”. También hace foco en alinear prácticas nacionales con los estándares de la Organización Mundial de Aduanas, un eje que el Gobierno viene destacando como parte de su estrategia de transparencia.
El entendimiento encaja dentro de una agenda bilateral más amplia que en los últimos meses incluyó compromisos para atraer inversiones y mejorar la trazabilidad en sectores estratégicos. Entre ellos:
-Intercambio de información sobre soja, un tema clave por el peso de Argentina como exportador global.
-Cooperación en minerales críticos, un asunto cada vez más relevante en el tablero geopolítico.
-Coordinación para estabilizar el comercio global de soja, lo que reavivó debates sobre incentivos fiscales para el agro —como el famoso tax holiday— y mostró cómo la agenda aduanera se cruza con decisiones económicas más amplias.
Los beneficios que el Gobierno destaca
Según fuentes oficiales y analistas del sector, el acuerdo podría generar varios impactos positivos:
-Mayor competitividad y eficiencia. La digitalización y la reducción de tiempos logísticos le dan aire al sector privado y mejoran su posición en el comercio internacional.
-Modernización institucional. El avance tecnológico reduce la discrecionalidad y permite una Aduana más transparente.
-Refuerzo de la seguridad. El intercambio de información con la CBP mejora la detección de contrabando, narcotráfico y otros delitos transnacionales.
-Mejor alineamiento internacional. Cumplir los estándares de la OMA facilita operaciones con otros mercados y mejora la imagen del país ante socios comerciales.
Como suele pasar, no todo es sin costo. Especialistas advierten tres efectos a monitorear:
-Mayor escrutinio sobre las operaciones. Los controles segmentados por riesgo y el flujo de información pueden implicar una supervisión más intensa sobre exportadores e importadores argentinos.
-Dependencia tecnológica. La adopción de sistemas compatibles con la CBP podría implicar inversiones elevadas y una coordinación muy estrecha con EE.UU.
-Presión en áreas sensibles. Este acuerdo se firma en paralelo a negociaciones sobre soja y minerales críticos, lo que alimenta la lectura de que la cooperación aduanera es parte de un paquete más amplio donde Washington podría influir en decisiones económicas estratégicas.
En un contexto de necesidad de inversiones, modernización del Estado y mejora en los tiempos logísticos, para el Gobierno este acuerdo representa una señal de profesionalización institucional. Sin embargo, también consolida un vínculo cada vez más estrecho con un partner que suele fijar condiciones claras.
El desafío, dicen en el sector, será aprovechar la modernización sin perder autonomía en áreas clave del comercio exterior.
