Prada compra Versace, ¿Se viene una nueva era en la moda de lujo?

La reciente adquisición de Versace por parte de Prada marca un nuevo capítulo en el mundo de la moda de lujo. La unión de estas dos casas italianas dará origen a un conglomerado con ingresos estimados en más de 6.000 millones de euros, lo que les permitirá competir de manera directa con otros protagonistas del sector como LVMH y Kering. Prada anunció que ha alcanzado un acuerdo definitivo con el grupo estadounidense Capri Holdings para adquirir el 100% de Versace por un monto de 1.250 millones de euros. 

Esta operación será financiada a través de la emisión de 1.500 millones de euros en nueva deuda, lo que subraya el compromiso de Prada por fortalecer su posición en el mercado del lujo global. La incorporación de Versace complementará el actual portafolio de Prada, que incluye marcas como Miu Miu. Aseguran que la combinación de estas identidades permitirá al nuevo grupo ofrecer una gama más diversa de productos y estilos a un público internacional cada vez más exigente.

En cuanto a los cambios internos, Donatella Versace, quien ha estado al frente de la dirección creativa durante casi tres décadas, asumirá un rol más institucional como embajadora principal de la marca. En su lugar, Dario Vitale, diseñador con experiencia en Miu Miu, tomará las riendas creativas de la casa. Por otro lado, Capri Holdings ha señalado que, tras esta operación, centrará sus esfuerzos en consolidar su marca insignia, Michael Kors, y buscará opciones estratégicas para Jimmy Choo, incluyendo una posible venta.

En los últimos años, se han producido varias adquisiciones del mismo tipo, como por ejemplo la compra de Tiffany & Co. por parte de LVMH en 2021, en una operación valorada en cerca de USD 15.800 millones, considerada una de las mayores en la historia del sector. También destaca la adquisición de Stone Island por parte de Moncler en 2020, por un monto de 1.150 millones de euros, con el objetivo de reforzar su liderazgo en ropa de lujo con inspiración urbana.

Asimismo, en 2024 se intentó una fusión entre Tapestry (propietaria de Coach y Kate Spade) y Capri Holdings, en un acuerdo que habría alcanzado los USD 8.500 millones. Sin embargo, la operación fue bloqueada por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos debido a preocupaciones sobre la competencia en el mercado, lo que llevó a ambas partes a cancelar la transacción. Estos movimientos muestra una tendencia a la expansión y la diversificación para mantenerse competitivas en el mercado global.