Ni huevos ni conejos: la nueva receta de chocolate que es tendencia en estas Pascuas y los reemplaza
Fácil y económica, la receta permite a las familias crear su propia dulzura, convirtiendo la elaboración en una actividad divertida y creativa.
Por redacción
En los últimos tiempos, se ha generado un verdadero fenómeno en la cocina argentina, especialmente en época de Pascuas. La elaboración de productos de chocolate caseros ha ganado un espacio notable entre quienes buscan alternativas más accesibles y creativas a los tradicionales huevos de Pascua. La nueva tendencia que ha irrumpido con fuerza en este ámbito es una particular versión de chocolate con forma de carpincho o capibara, la cual seduce tanto por su presentación como por su sabor.
El origen de esta ingeniosa idea proviene de una emprendedora de Formosa, cuya receta ha alcanzado gran popularidad y se ha divulgado ampliamente. Lo que comenzó como una búsqueda de opciones económicas para quienes no pueden afrontar los altos precios del mercado, ha evolucionado en una divertida actividad para compartir en familia y amigos durante la celebración.
Esta variante del huevo de Pascua es mucho más que un simple dulce; cada carpincho de chocolate está elaborado con un 100% de chocolate natural, lo que garantiza tanto un excelente sabor como una presentación visual atractiva. Los detalles que simulan la nariz y el pecho del animal se convierten en un distintivo que llama la atención y aporta un toque de originalidad a las mesas de Pascua. Además, estas delicias pueden adaptarse a diferentes tamaños, incluso en versiones de paletas, brindando a los consumidores una variedad de opciones para elegir.
Cómo hacer carpinchos de chocolate para estas Pascuas
Para aquellos interesados en experimentar con esta receta, los ingredientes son accesibles: 200 gramos de chocolate negro o con leche, 100 gramos de chocolate blanco para las decoraciones, moldes en forma de carpincho (que pueden ser de plástico o silicona), y una serie de decoraciones como caramelos, confites y colorantes comestibles. La preparación es sencilla y puede involucrar a toda la familia en el proceso.
El paso a paso es bastante intuitivo: es fundamental comenzar por limpiar y secar adecuadamente el molde elegido. Luego, se trocean los 200 gramos de chocolate y se derriten en el microondas o a baño maría. Es crucial asegurarse de que el chocolate líquido cubra por completo el molde para obtener un buen resultado. Posteriormente, se deben colocar los moldes en la heladera o freezer hasta que el chocolate adquiera la consistencia deseada. Finalmente, con cuidado, se retiran los moldes y se decora cada carpincho con el chocolate blanco, colorantes y otros elementos por elección, dejando volar la creatividad.
En conclusión, esta innovadora propuesta no solo ofrece una alternativa económica para las festividades, sino que también fomenta la creatividad y el trabajo en equipo dentro del hogar, convirtiendo la elaboración de estos carpinchos en una actividad lúdica y deliciosa para todos.
