BYD enfrenta su mayor retiro de autos: más de 115.000 vehículos con fallas en las baterías
El gigante chino deberá revisar miles de unidades de sus modelos Tang y Yuan Pro fabricados entre 2015 y 2022. Los problemas están ligados a defectos de diseño y riesgos de incendio en las baterías. Es el retiro más grande en la historia de la compañía.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El fabricante chino BYD, uno de los principales jugadores del mercado global de autos eléctricos, anunció un retiro masivo de más de 115.000 vehículos debido a fallas en el diseño y riesgos potenciales en las baterías. Se trata del recall más grande en la historia de la marca, que viene ganando terreno a nivel mundial con su estrategia de electrificación y precios competitivos.
Según informó la Administración Estatal de Regulación del Mercado de China, la medida alcanza a 44.535 unidades del modelo Tang, producidas entre marzo de 2015 y julio de 2017, que presentan componentes defectuosos capaces de generar un funcionamiento anormal. Además, se suman 71.248 autos Yuan Pro eléctricos, fabricados entre febrero de 2021 y agosto de 2022, con problemas de instalación en las baterías que podrían aumentar el riesgo de sobrecalentamiento o incendio.
BYD ya presentó un plan ante las autoridades para revisar y reparar los vehículos afectados sin costo para los propietarios, aunque no se informó si la campaña se extenderá a otros mercados fuera de China. Desde la empresa aseguraron que “la seguridad de los usuarios es prioridad” y que están trabajando en mejoras estructurales para evitar fallas similares en el futuro.
La noticia llega en un momento clave para BYD, que busca consolidarse fuera de China, especialmente en América Latina y Europa, donde viene ganando terreno frente a gigantes como Tesla. Sin embargo, estos episodios podrían poner en duda la confiabilidad de sus sistemas eléctricos, un punto sensible para una marca que basa su reputación en la innovación tecnológica.
Aun con este golpe, BYD sigue siendo un peso pesado del sector. En lo que va del año, ya vendió más de 2,5 millones de autos eléctricos e híbridos, y continúa invirtiendo fuerte en investigación y desarrollo. Pero la presión aumenta: los consumidores globales exigen más seguridad y transparencia, y cada falla de este tipo se convierte en una prueba de fuego para su credibilidad.
Con este recall, BYD se suma a la lista de fabricantes que enfrentan desafíos por la complejidad de las baterías de nueva generación. El futuro eléctrico avanza, pero el camino, está claro, no está exento de cortocircuitos.