Día de la Tierra: ¿Por qué se celebra hoy y cuáles fueron sus orígenes?
Desde sus inicios en la década de 1960, el Día de la Tierra ha evolucionado hasta convertirse en un evento global que promueve la concientización sobre la protección del medio ambiente y la necesidad de cuidar nuestro planeta.
Por redacción
Hoy 22 de abril se celebra el Día de la Tierra, una jornada que invita a reflexionar sobre el cuidado del ambiente y la forma en que los seres humanos nos relacionamos con el planeta que habitamos. No se trata solo de plantar un árbol o apagar la luz unos minutos: es una fecha que nos recuerda que el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación no son problemas del futuro, sino del ahora.
Un poco de historia
El Día de la Tierra tiene sus raíces en la década de los 60, cuando la preocupación por el medio ambiente comenzó a manifestarse de manera evidente en la sociedad. Según explica en un artículo de National Geographic el periodista Rogers, "el medioambiente empezaba a sufrir y la gente estaba enfadada".
Esta inquietud fue capitalizada por el senador de Wisconsin, Gaylord Nelson, quien realizó un ferviente trabajo en defensa del entorno natural. En 1969, Nelson llevó a cabo una masiva manifestación que reunió a 20 millones de personas en un llamado de atención sobre la salud del planeta. Recordando esos momentos históricos, Nelson expresó en un ensayo poco antes de su fallecimiento en julio de 2005 a los 89 años que “fue algo frenético. Nos llegaban telegramas, cartas y consultas telefónicas desde todas partes del país”.
Con el fin de organizar la primera celebración del 22 de abril en 1970, Nelson contó con la colaboración del activista Denis Hayes. Gracias a sus esfuerzos, se consiguió una gran repercusión en el ámbito político y social, lo que condujo a la creación de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) a finales de ese mismo año. “Fue verdaderamente increíble lo que pasó. Los muros simplemente se derrumbaron”, señala Rogers, al resaltar el impacto de esos acontecimientos.
A partir de entonces, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano de 1972 en Estocolmo jugó un papel crucial, ya que sentó las bases para una mayor toma de conciencia global sobre la interrelación de los seres vivos y el entorno que habitamos. En esta instancia, se estableció el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente y se constituyó el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), tal como resume la información brindada por la ONU en su sitio web.
El compromiso internacional en pro del medio ambiente continuó en 1992, cuando más de 178 países firmaron la Agenda 21 y la Declaración sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo durante la 'Cumbre de la Tierra' en Río de Janeiro, Brasil. Sin embargo, no fue sino hasta el año 2009 que la ONU oficializó la celebración del Día de la Tierra mediante una resolución en la Asamblea General.
¿Por qué importa?
El planeta está en un punto crítico. Las emisiones de gases de efecto invernadero siguen creciendo, el uso desmedido del plástico contamina océanos y suelos, y cada día se pierden miles de especies. En este contexto, el Día de la Tierra no es solo simbólico: es un llamado urgente a la acción.
En los últimos años, una serie de desastres naturales ha intensificado las alarmas sobre la situación ambiental y ha puesto de relieve la importancia de la problemática.
¿Qué podemos hacer desde acá?
Aunque a veces parece que todo depende de las grandes empresas o los gobiernos, nuestras acciones individuales también cuentan. Desde cambiar hábitos de consumo hasta participar en espacios colectivos, cada gesto suma:
Reducir el uso de plásticos de un solo uso.
Apostar por alimentos locales y de temporada.
Separar residuos y compostar.
Elegir medios de transporte más sustentables.
Informarse y compartir contenido ambiental.