Se anula la licitación para la Hidrovía, ¿posibles maniobras anticompetitivas?: qué sucedió
La ANPYN anuló la licitación para la Hidrovía debido a la falta de competencia, ya que solo hubo una oferta. El Gobierno de Javier Milei deberá garantizar la continuidad del servicio en este corredor clave para el comercio exterior.
La Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPYN) tomó una decisión relevante al anular la Licitación Pública Nacional e Internacional N° 1/2024, que estaba destinada a la operación de la Vía Navegable Troncal Hidrovía, un corredor esencial para el comercio exterior argentino. La controversia surgió debido a la falta de competencia, ya que solamente se recibió una propuesta de la firma belga Dredging, Environmental and Marine Engineering NV (DEME), tras la inesperada retirada de Jan de Nul, la concesionaria actual del mantenimiento del dragado.
Jan de Nul argumentó que su salida del proceso se debió a impugnaciones de competidores y a una "durísima campaña mediática" en su contra, además de condiciones que consideraron excesivas para el tipo de servicio requerido. Esta situación llevó a la ANPYN a consultar frenéticamente con la Casa Rosada ante la falta de competidores, lo que culminó en la cancelación de la licitación. Con una operación que representa el 80% del comercio exterior argentino, surge ahora la incógnita de cómo el Gobierno de Javier Milei garantizará la continuidad de los servicios en este tramo estratégico.
En el centro de esta controversia se encuentra Iñaki Miguel Arreseygor, quien dirige la ANPYN. Arreseygor, que cuenta con una sólida formación en administración de negocios y experiencia tanto en el ámbito público como privado, ha tenido un recorrido notable en la política. Comenzó su carrera como asesor en el Senado y pasó a ocupar roles relevantes en distintos ministerios, destacándose en el área de compras y contrataciones.
Desde mayo de 2024, ocupa el cargo de director ejecutivo de la ANPYN, donde enfrenta el reto de reorganizar el proceso licitatorio en un escenario cargado de incertidumbres y alegaciones de competencia desleal. El Gobierno continúa a la espera de respuestas de otras empresas que no participaron en la licitación y aún no ha establecido un cronograma para el lanzamiento de una nueva convocatoria.
Mientras tanto, el sector exportador expresa su preocupación por la falta de claridad en el futuro del dragado, esencial para mantener la navegabilidad del río Paraná. Diversas cámaras empresariales han solicitado al Gobierno que priorice soluciones rápidas para evitar interrupciones en las operaciones.
