La OPEP elevó su pronóstico de demanda mundial de petróleo | Dolarhoy.com
Petróleo|10 de octubre de 2023

La OPEP elevó su pronóstico de demanda mundial de petróleo

La OPEP destacó que la expansión de la demanda de petróleo se espera en India, China, otros países asiáticos, África y Medio Oriente, y, para satisfacer esta demanda, se requerirá una inversión masiva de USD 14 billones en la industria petrolera.

Por Gonzalo Andrés Castillo

 

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) aumentó sus previsiones a medio y largo plazo para la demanda mundial del crudo, desencadenando una intensa disputa con la Agencia Internacional de Energía (AIE).

 

Según el último informe de la OPEP, se estima que la demanda global de petróleo alcance los 116 millones de barriles por día (bpd) para 2045, en comparación con los 99,6 millones de bpd en 2022. Esta proyección es significativamente mayor a la de la AIE, que sostiene que el mundo se encuentra en el "principio del fin" de la era de los combustibles fósiles.

 

La OPEP destacó que la expansión de la demanda de petróleo se espera en India, China, otros países asiáticos, África y Medio Oriente, y, para satisfacer esta demanda, se requerirá una inversión masiva de USD 14 billones en la industria petrolera, aproximadamente USD 610.000 millones por año en promedio.

 

El secretario general del organismo, Haitham al-Ghais, advirtió que detener las inversiones en nuevos proyectos petroleros sería un error y podría resultar en caos económico y energético. De hecho, afirmó que la historia está llena de ejemplos que ilustran las consecuencias de no reconocer la complejidad de las cuestiones energéticas.

 

La discrepancia entre la OPEP y la AIE se intensificó en los últimos años, ya que la AIE estuvo abogando por reducir drásticamente el uso de petróleo, gas y carbón para abordar el cambio climático. Por otro lado, la OPEP se encontró presionando por mantener y expandir la producción de crudo.

Recientemente, la AIE declaró que la demanda máxima de petróleo podría alcanzarse antes de 2030 e indicó que reducir el consumo de combustibles fósiles es esencial para limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, mientras que la OPEP sigue enfocada en un crecimiento significativo de la demanda petrolera en las próximas décadas.

 

Esta disputa entre dos actores clave en la industria energética refleja la creciente tensión en torno a la transición hacia una economía baja en carbono y las implicaciones para la producción y el consumo de petróleo en el futuro.