Analistas aseveran que la inflación en junio sería de un dígito | Dolarhoy.com
Economía|10 de marzo de 2024

Analistas aseveran que la inflación en junio sería de un dígito

El REM publicado recientemente por el Banco Central indicó que las estimaciones de analistas evidencian una gran baja de inflación para el segundo semestre del año. 

Por redacción

 

Los primeros días de marzo extiendan la racha bajista de la suba generalizada de precios. Así, las expectativas de expertos se alinean un 15%, mientras que volvería a caer a un dígito para mediados de año.

 

Existen varios motivos que permiten ser medianamente optimistas respecto a la evolución de la inflación, que de todos modos continúa en valores elevados. La “buena noticia” es que la tendencia es bajista y esto también se repetiría este mes, aunque todavía no transcurrió ni una semana.

 

Uno de los factores centrales es el “apretón monetario”, que secó el mercado de pesos. Esto tiene un impacto negativo en el consumo y en la actividad económica en general, pero a su vez es una condición imprescindible para ayudar a bajar la inflación. La debilidad del dólar libre refleja en buena medida este fenómeno. El “no hay plata” de Javier Milei tiene efectos palpables en la cotización del dólar pero también en la marcha de la economía.

 

Luego del pico de 25,5% de diciembre, comenzó un proceso de desinflación que podría mantenerse también en marzo. Los precios en los supermercados no presentan subas tan fuertes, algunos regulados ya ajustaron en febrero y la recesión también hace su “trabajo”.

 

El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) divulgado ayer por el Banco Central estimó un índice de inflación del 14,3% para marzo, un pronóstico que se ubicó 1,1 punto porcentual por debajo del mes anterior. El informe del BCRA espera que la inflación llegue a un dígito mensual en junio, con un 8,5%.

Lo que sí luce como una opinión bastante más generalizada es que el proceso de desinflación retomará con fuerza en abril, un mes en el que REM espera un 12 por ciento. Para entonces, se considera que el traspaso de la devaluación de diciembre a alimentos ya habrá perdido mucha fuerza, pero que además el Gobierno está decidido a mantener el ajuste del dólar oficial en el 2% mensual. Por otra parte, se trata de un mes con una estacionalidad mucho más baja, aunque seguramente impactarán algunos ajustes tarifarios.

 

En su discurso ante la asamblea legislativa, el Presidente consideró que la baja del dólar también preanuncia que la desaceleración de los precios será más rápida. Para el Gobierno es fundamental que la inflación se desinfle lo más rápido posible y que a partir de allí comience la recuperación de los salarios y otros ingresos, ya que eso permitiría una mejora gradual pero sostenida de la economía.

 

La caída de los salarios solo entre diciembre y enero superó el 20%, en un contexto, ya que vienen muy rezagados en relación a la inflación. Esa caída podría estabilizarse en febrero y podría verse una mejora gradual a partir de marzo.

 

En ese sentido, el posible regreso del impuesto a las Ganancias para asalariados es una mala noticia porque atrasaría la recuperación del poder adquisitivo, al restar ingreso disponible para los empleados.