Los mercados globales cayeron a la espera de los anuncios de la FED
Las bolsas fueron golpeadas ante el crecimiento de incertidumbre, en el inicio de una semana en la que los inversores esperan los anuncios de la FED y los resultados de balances corporativos importantes.
Los mercados bursátiles caían este lunes tras seis sesiones al alza, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a 10 años subía por tercera jornada consecutiva, a la espera de los anuncios de los bancos centrales y de datos que podrían arrojar luz sobre los progresos realizados en la reducción de la inflación.
Los inversores se mostraban con gran incertidumbre y exectativa de que la Reserva Federal suba las tasas de interés en 25 puntos básicos (pb) el miércoles, y que el jueves el Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo anuncien subidas de 50 pb.
"Esta es probablemente una semana en la que vamos a tener el valor de un año de sorpresas, por lo que me hace sentido que haya un poco de toma de beneficios, un poco de posicionamiento antes de algunas reuniones muy importantes, pero también la publicación de datos", dijo Brian Jacobsen, de Allspring Global Investments en Menomonee Falls, Wisconsin.
La bolsa neoyorquina también tendrá que lidiar con una serie de datos económicos estadounidenses, que culminarán el viernes con el informe de nóminas de enero. Los inversores consideran que las señales de debilitamiento del mercado laboral son un factor clave para reducir la elevada inflación. Otros datos incluyen indicadores de los sectores manufacturero y de servicios.
La temporada de balances empresariales en Estados Unidos también sigue en plena efervescencia y esta semana se esperan los reportes de empresas como Apple, Alphabet y Amazon.
Por su parte, el rendimiento de los bonos del Tesoro subía antes de las reuniones de los bancos centrales y los datos económicos. El de las notas a diez años avanzaba por tercera sesión consecutiva, con una mejora de 2,4 puntos básicos, al 3,542%.
En cuanto a los commodities energéticos, los precios del crudo retrocedían más de un 1% ante las previsiones de incrementos de los bancos centrales y señales de fortaleza de las exportaciones rusas.
