El Banco Central Europeo modera sus subas de tasas y las eleva medio punto porcentual | Dolarhoy.com
Europa|15 de diciembre de 2022

El Banco Central Europeo modera sus subas de tasas y las eleva medio punto porcentual

Luego de mantener su tasa por años en niveles mínimos con el objetivo de impulsar la economía de los 19 países que utilizan al euro, el BCE realizó desde julio cuatro aumentos de tasas: uno de 50 puntos y dos de 75.

Por redacción

 

El Banco Central Europeo (BCE) dispuso hoy una nueva alza en sus tasas de interés de 50 puntos básicos, siguiendo la misma línea de moderación que efectuó ayer la Reserva Federal estadounidense (FED), al tiempo que advirtió que la economía del bloque monetario podría entrar en contracción en el cierre de este año.

 

Luego de mantener su tasa por años en niveles mínimos con el objetivo de impulsar la economía de los 19 países que utilizan al euro, el BCE realizó desde julio cuatro aumentos de tasas: uno de 50 puntos y dos de 75.

 

Como consecuencia del alza de 50 puntos de este mes, que coincide con la expectativa que tenían los economistas y el mercado, ahora la tasa de interés para las operaciones de financiación, la de depósito y la de facilidad de préstamo subirán a 2,50%, 2,75% y 2%, respectivamente, el mayor nivel desde fines de 2008.

 

El objetivo es frenar a una inflación que, motorizada por los precios de la energía y los alimentos, alcanzó un pico de 10,6% interanual como promedio en el bloque durante octubre, para luego caer a un 10% el mes pasado, el primer descenso en el índice en 17 meses.

El hecho de que la política monetaria parece comenzar a rendir sus frutos motivaron al BCE a moderar sus tasas este mes, en la misma línea que la FED, que ayer dispuso una suba en su tasa de 50 puntos, finalizando con una seguidilla de cuatro alzas consecutivas de 75 puntos. Sin embargo, la entidad europea afirmó, en un comunicado, que prevé continuar con las alzas en las tasas, frente a proyecciones de inflación para 2023 más altas que las anticipadas.

 

Al analizar los datos del último índice de noviembre, el BCE destacó la baja en los precios de la energía, pero advirtió que “la inflación en los alimentos y las presión de precios subyacentes en la economía se reforzaron y persistirán por algún tiempo”.

 

“Tenemos que esperar, por un tiempo, subas de 50 puntos. Tenemos más terreno que cubrir”, dijo la presidenta del banco, Christine Lagarde, en una conferencia de prensa, según la agencia Bloomberg.

 

El organismo prevé que la inflación caerá a un promedio de 6,3% en 2023, con la misma cayendo a lo largo del año entrante, para luego ubicarse en 3,4% en 2024 y 2,3% en 2025.

 

“El Consejo Gobernante considera que las tasas de interés tienen que subir significativamente en un ritmo sin pausa para alcanzar niveles que sean suficientemente restrictivos con el objetivo de asegurar un retorno a tiempo a la meta de inflación de mediano plazo del 2% anual”, indicó el organismo.

 

Desde el punto de vista del BCE, mantener la inflación en niveles restrictivos permitirá reducir los precios al enfriar la demanda y evitar un desanclaje en las expectativas inflacionarias.

 

Por otro lado, la reunión monetaria del BCE también hizo foco en la política de tenencia de activos y se decidió que, desde marzo de 2023 en adelante, el programa de compras de activos del banco (conocido como APP) se irá reduciendo al no reinvertirse todos los bonos que venzan, lo cual –afirman analistas- podría motivar al banco a reducir el ritmo de subas de tasas.

 

La merma de los activos del banco será de alrededor de 15.000 millones de euros por mes en promedio en principio.

 

El programa, mediante el cual se compran activos como deuda pública y bonos corporativos, busca incidir en la economía real, impulsando a los bancos a conceder más préstamos y rebajar los costos de endeudamiento, una política de estímulo que el BCE consideró útil en un contexto de baja inflación pero que ya no se corresponde con el escenario actual.

 

El propio endurecimiento de las condiciones financieras promovido por el banco central, junto con la “crisis energética, la alta incertidumbre y el debilitamiento de la actividad económica global” podrían llevar –afirmó el BCE- a una “contracción en el actual trimestre y el primero del año próximo” en la economía de la Eurozona.

 

Sin embargo, de existir una recesión la misma sería “ligera y de corta duración”, según las proyecciones oficiales.

 

“El crecimiento, de todos modos, se mantendrá por debajo del promedio el próximo año y fue revisado a la baja respecto de nuestras anteriores proyecciones”, recalcó el banco.

 

La entidad ahora prevé un crecimiento del 3,4% para este año, 0,5% en 2023, 1,9% en 2024 y 1,8% en 2025.